Con motivo de celebrarse el domingo 04 de agosto el día de San Juan María Vianney, el Santo Cura de Ars, compartimos el saludo a los sacerdotes que escribieron los obispos de Quilmes Carlos José Tissera y Eduardo Gonzalo Redondo.
Saludo a los sacerdotes en su día
04 de agosto de 2024
Queridos amigos:
¡Feliz día!
Hace un mes tuvimos la dicha de compartir de Misa en que fueron ordenados sacerdotes tres hermanos nuestros: Sergio, Joaquín y Roberto. Como Iglesia de Quilmes hemos celebrado con alegría este gran regalo de Dios. Juntos seguimos dando gracias por la decisión de estos hermanos y por la gracia del orden sagrado que Dios les ha dispensado. Sangre nueva que revitaliza nuestro presbiterio y la vida de las comunidades.
También es cierto que aún tenemos el corazón traspasado de dolor por la repentina pascua de nuestro querido Padre Adrián Jesús Gómez. En la plenitud de su entrega al Señor y a su pueblo fiel fue llamado por Dios para estar en su presencia. Tan inesperada partida nos deja un sabor amargo en este caminar. Nos consuela saber que el Señor es el que llama también en ese momento último: “entra a participar del gozo de tu Señor” (Mt. 25, 23)
Queremos saludar a cada uno de ustedes que desarrollan su ministerio en la Diócesis o fuera de ella; a los jóvenes, a los de mediana edad o mayores; pero especialmente a los que están enfermos, a los que pasan por alguna dificultad física o espiritual; a los que están viviendo algún duelo, o los que están padeciendo alguna dificultad o situación que los angustia o entristece. Queremos en este día darles un abrazo fraterno y hacerles sentir nuestra paternal cercanía.
Las palabras de Jesús a Pedro: “apacienta mis ovejas” nos anima a entregarnos con amor cada día; amor que nace de la Eucaristía que celebramos. Nace de ese Jesús que en el altar del encuentro diario nos dice: “¿me amas?”. Unas veces con mucha alegría y seguros diremos que lo amamos; otras veces le diremos, como Pedro “Señor, tú lo sabes todo, sabes que te quiero”. Es la fuerza misteriosa del Espíritu Santo que obra en nosotros ¡Maravilla de Dios!
También el dolor y el sufrimiento de nuestro pueblo, de las personas de la comunidad, nos conmueve. Es el llamado de Dios a convertirnos en buenos samaritanos: conmovernos ante el hermano, la hermana tirada a la orilla del camino. Conmovernos y, como pastores que somos, juntarnos, unirnos para poder ayudar, aliviar, sostener, animar, levantar, acompañar a tantas y tantos que sufren. Caminemos juntos en esperanza. Juntos seamos un bálsamo de amor para nuestro pueblo.
Con nuestro pueblo somos una cosa, hermanados por la fe que el Bautismo nos ha regalado. Nuestra fe es puesta a prueba, a veces de modo disfrazado, otras directamente. Entre todos cuidemos la fe. En algunos domingos más estaremos escuchando a Jesús que dice a los discípulos: “¿también ustedes quieren irse?” (Jn. 6, 67) “La gracia nos otorgó entonces una respuesta que contiene la totalidad de la fe del cristianismo y su última fundamentación: ´Señor ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna. Nosotros hemos creído y sabemos que eres el Santo de Dios´ (Jn. 6, 68-69) Nuestra vida como sacerdotes y cristianos está resumida en esta frase” (Karl Rahner SJ. Conferencia a sacerdotes de Münster. 1967)
Siendo domingo este 4 de agosto, celebraremos con las Comunidades nuestro día. Que todos pasen un hermoso Domingo y día del Sacerdote.
El San Juan María Vianney, cura de Ars, y nuestro Santo Cura Brochero los protejan siempre. El beato obispo mártir Enrique Angelelli, nos ayude a ser testigos de la fe hoy.
¡Dios los bendiga! ¡Un fraternal abrazo!
+ Carlos José Tissera
Obispo de Quilmes
+ Eduardo Gonzalo Redondo
Obispo Auxiliar de Quilmes
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